Cómo crear un efecto de pared panelada

• una moldura decorativa
• unas cuantas hojas de papel de tamaño grande
• tiza
• una cinta métrica
• una sierra para metales pequeña
• una caja de ingletes
• pintura para la moldura
• un pegamento (en lugar de clavos) para pegar la moldura a la pared

Recomendamos utilizar hojas de papel grandes para esbozar el tamaño y la forma de los paneles que quieres crear. Pégalas a la pared con cinta de enmascarar, así las podrás mover y hacerte una idea de cómo queda el espacio.

Los paneles rectangulares son los más sencillos, pero si confías en lo que estás haciendo, puedes recrear las esquinas recortadas que se ven en esta imagen.

Marca con tiza y cinta métrica en qué lugar quieres colocar los paneles en la pared. Un nivel de burbuja y una plomada pueden servirte de ayuda para asegurarte de que los bordes estén nivelados y derechos.

Si pegas la cinta de enmascarar de baja adhesión por encima de las marcas de tiza te dará una buena idea de cómo quedará.

Puedes comprarla en diferentes formas y tamaños en tiendas de bricolaje y madera o ferreterías especializadas.

Una vez que hayas comprado las molduras y estés listo para empezar, utiliza una sierra para metales pequeña y una caja de ingletes para cortar las molduras en un ángulo de 45 grados. Líjalas suavemente para que encajen en esquinas perfectas.

El color que elijas para pintar las molduras influirá en la clase de ambiente que quieres crear en el espacio. Si quieres emular un hermoso estilo rústico francés, opta por un blanco luminoso.

Si te apetece un look más atrevido, prueba a pintar las molduras de un color más vivo y combínalas con una pared neutra.

Cuando la pintura se haya secado, fija las molduras a la pared con un pegamento que actúe como si se tratara de clavos (como los que vienen en un tubo con aplicador para que quede perfecto).

Las molduras tardarán al menos 24 horas en secarse totalmente.